27 de noviembre de 2010

EL EUCALIPTO



El eucalipto es un árbol de gran porte que procede de Australia y Tasmania. Por su rápido crecimiento es frecuente encontrarlo en toda la cuenca mediterránea, América del Sur y grandes zonas de Asia.
Alcanza los 35 metros de altura, pudiendo llegar hasta los 100 metros en su lugar de origen. La corteza de su tronco se rompe espontáneamente en grandes láminas. Sus hojas son alargadas y algo curvadas. Forma unos grandes botones florales y el fruto es una cápsula con varias semillas. Las hojas de las ramas adultas se recolectan cuando están perfectamente formadas.
La infusión y las inhalaciones de hojas de eucalipto son expectorantes y estimulan y descongestionan las células secretoras de la mucosa bronquial, por lo que también se utilizan en el tratamiento de la bronquitis, la neumonía y el asma.
Los vahos de eucalipto también protegen de las infecciones, ya que al inhalarse producen un efecto antiséptico, que también ayuda a bajar la fiebre, y son muy utilizados cuando se padece gripe e inflamaciones de garganta. Aplicados por vía externa, el aceite esencial alivia el dolor producido por el reumatismo.

6 comentarios:

  1. Duerme Rafaela

    La luna llena señala
    En la silla un tulipán
    La penumbra del cuarto
    Esconde el cuerpo marcado

    En el monte de los sueños
    Ni un lobo a aullar
    hierba mala extirpada
    claveles renacen en su lugar

    Viborrillas en las piedras
    Cristales rotos en el quintal
    Noche fria, cuerpo cálido
    Duerme alguna ninfa desnuda

    Un Lobo a aullar en el monte
    Sueño con la luna llena
    Ni ninfas desnudas, ni claveles
    Cristales rotos en el cuarto

    El cuerpo frio en la silla
    Esconde el tulipán del quintal
    La penumbra en las piedras
    Esconde la hierba extirpada

    La noche cálida, señala sueños
    Duerme Rafaela, duerme y sueña...
    No hay luna llena, no hay penumbras
    Una silla en el cuarto y nada más...



    Carlos Gimenez Coleto

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  2. el charco matamujeres30 noviembre, 2010

    hola.
    creo que de eucaliptos sabes mas que yo.y no es mi intencion corregir a nadie.
    pero ocalistos como decimos aki,yo conosco dos clases,blanco y rojo.
    el rojo que al cortarlo su madera por el centro es rojiza y muy dura.por eso antes se utilizaba para traviesas de trenes, hoy solo para estufas y chapas de encofrar en la conctrucion.
    pero casi no merece cortarlo, pues el kilo no llega a dos centimos. por tanto esta por debajo del coste laboral...
    el blanco es el que se utiliza para la medecina, y su madera si que tiene atractibo en carpinteria.por tanto si es rentable.
    pero yo solo conosco como una hectarea de eucalicto blanco.
    esta se encuentra pegada a los olivos de san serafin,,poco por bajo de el silo y estacion.
    el recto de los eucalictos de la garganta son rojos.. por cierto el blanco tiene la hoja un poco mas grnde que el rojo.

    un saludo:

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  3. Aunque me crié debajo de un eucalipto, no aprendí tanto sobre ellos como para saber lo que he escrito. Esto se entiende que lo he buscado en Internet, para mi información y luego he copiado. Pido disculpas, tendría que haberlo dicho antes.
    Un saludo.

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  4. Estoy apollardao con "el charco"... Vaya hombre, eres un cachondo...

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  5. Me crié al lado de dos eucaliptos enormes, llenos de pájaros, como sabéis. Una cosa que no me gusta del eucalipto es que deja todo seco a su alrededor. Él se chupa todo el agua y no deja crecer nada más en su entorno. Alguna vez lo he utilizado, hervido, para algún catarro.

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  6. En la puerta de mi casa, empezaba lo que yo creía que era un bosque de eucaliptos y debajo de uno muy grande, cuando llegaba el verano se ponía una mesa, allí pasábamos gran parte del día. Pero el suelo debajo de ellos era seco y árido.
    Para los catarros no había nada mejor que la infusión de hojas de eucalipto blanco con miel.

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